En el cuello caja, he añadido un vivo hueco de raso en color oro con piquillo camel y volante de la tela de cuadros. A juego está hecha la cinturilla de raso con piquillo y como adorno central, un lazo confeccionado de la misma tela de vichy, que como en otras ocasiones, está unido al vestido con automáticos.
La manga larga está rematada con una goma interna, que hace que se ajuste mejor al brazo.
Los botones de la parte de atrás también son de un color dorado claro.
Los zapatos que le he comprado son de charol imitando a piel de serpiente en color camel oscuro a juego con el raso, pero un camel clarito también le iría perfecto.
El accesorio para el pelo es una diadema algo más especial que las que he diseñado hasta ahora porque el diseño y tejidos empleados para este vestido permiten que se utilice en ocasiones un poco más señaladas. ¿El raso dorado no os recuerda a la Navidad? Yo creo que sería muy adecuado para esos días tan bonitos del año.
Espero que os guste tanto como me gusta a mí. Ya me contaréis...